La Fundación Universitaria UNISANGIL y la Universidad Santo Tomás han unido esfuerzos para fortalecer la investigación científica en un proyecto que busca implementar tecnología de desinfección física de aguas residuales vertidas en el Río Fonce, en San Gil, Santander. Este ambicioso proyecto tiene como objetivo garantizar la sostenibilidad del recurso hídrico en la región.
Profesionales de la USTA visitaron las instalaciones de UNISANGIL para presentar el avance del desarrollo del filtro de nanocelulosa, que se implementará como una membrana de nanopartículas de plata. Esta tecnología actuará como filtro final para incrementar el resultado óptimo de desinfección en el proceso de tratamiento de aguas residuales.
Frank Vargas, biólogo e investigador de UNISANGIL, destacó la importancia de este trabajo conjunto: "Es un esfuerzo articulado entre ambas universidades que busca mejorar la eficiencia y desinfección de las aguas residuales vertidas en el Río Fonce, específicamente en la Planta de Bombeo y Aducción (PBA) del municipio de Villanueva".
La implementación de esta tecnología está prevista para este mismo año en cinco puntos estratégicos: el vertimiento de la Empresa de Servicios Públicos de Santander (ESSA), una finca cafetera en el municipio de El Páramo, la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) de Valle de San José, el Relleno Sanitario El Cucharo y la PBA de Villanueva.
Además de mejorar la calidad del agua en el Río Fonce, esta colaboración entre UNISANGIL y USTA busca promover la investigación interdisciplinaria y el desarrollo sostenible en la región.