>>¡Bienvenidos tomasinos a una nueva entrega de los “Melos”! Una de las pasiones que solemos heredar de nuestros padres, es la pasión por el fútbol, a muchos les gusta verlo y disfrutarlo pero Felipe Fajardo graduado tomasino de Negocios Internacionales fue más allá y empezó a practicarlo porque es un deporte que siempre lo ha inspirado y nos demuestra, que si juntas el talento, las habilidades y la constancia, puedes representar incluso a tu universidad y lograr lo que te propones.
Bueno, preséntate ¿Quién es Felipe?
Soy un muchacho enamorado de la vida, un muchacho que aprende día a día, que respeta el proceso y que le gustan los retos, un muchacho que sueña con superarse y demostrarse a sí mismo que con trabajo duro todo se puede.
¿En qué momento te diste cuenta que lograbas dominar el balón y era el deporte que querías practicar?
Desde muy pequeño crecí entre este ambiente futbolero, heredando la pasión de mi papá y empezando a enamorarme de este deporte muy chico, siempre me gustó la adrenalina con la que jugaba cada partido y hasta ahora, es el deporte que me acompaña y de seguro el que me acompañará por el resto de mi vida.
¿Cómo iniciaste para que poco a poco consiguieras los logros que mencionas?
Empecé jugando en equipos de barrio con mis amigos, torneos amateur en donde en muchas ocasiones logramos el primer puesto, luego a los 13 años empecé a jugar fútbol 11 en un equipo del Norte de Bogotá, más tarde a los 14 volví al futsal jugando en mi primer club importante en donde pasé mucho tiempo y donde tuve la oportunidad de hacer un proceso profesional con 16 años, luego de esto entré a la Universidad Santo Tomás logrando allí consolidar un excelente equipo con el que lo ganamos prácticamente todo a nivel universitario.
¿Cómo jugar fútbol ha cambiado tu vida?
Creo que aparte de ser un factor importante en la salud del ser humano, el deporte, y el fútbol en este caso me ha ayudado a las cosas básicas de la vida, a socializar, a compartir, a divertirme y lo más importante a forjar un carácter. Creo que hoy en día los mejores amigos que tengo los conocí jugando este bello deporte.
¿Consideras el fútbol como una pasión o simplemente un hobby que te gusta practicar?
Está pasión por el fútbol siento que se va transformando respecto pasa el tiempo, cuando fui niño simplemente pensaba en disfrutar del deporte con mis amigos, años más tarde lo vi como una opción de vida, fue ahí donde empecé a tener disciplina y a entrenar más fuerte para mejorar día tras día, pero hoy en día, lo veo como la pasión y el deporte más lindo del mundo a pesar de qué mi vida profesional está centrada en otros caminos jamás dejaré de verlo como lo más hermoso que alguna vez me pasó.
Aunque Felipe estudió Negocios Internacionales y no una carrera tan a fin al deporte, siempre se destacó y ha intentado ser el mejor en todo lo que hace, pues sabe equilibrar sus gustos, su profesión y sobre todo el gran amor que tiene por el fútbol y gracias a ello, ahora disfruta y ha tenido experiencias internacionales en Australia pero nunca dejando a un lado el fútbol porque es algo que lleva en las venas, en las piernas y sobre todo, en el corazón.
Felipe nos enorgullece pues definitivamente en su paso por esta experiencia universitaria, también nos otorgó grandes logros a nivel deportivo y eso inspira a que otros chicos se motiven a ser los mejores, no solo académicamente sino en la disciplina que más les gusta.