Con una activa participación de la comunidad tomasina se realizó en los diferentes campus de nuestra Santoto el tercer día de la Novena de Aguinaldos, que llevó por mensaje principal: LA GRATITUD, de ella destacamos 5 tips fundamentales:
1. Lleva un diario de gratitud: En él podrás anotar al menos 3 cosas por las cuales estemos agradecidos, puede ser por ejemplo a la hora del desayuno, luego al almuerzo y antes de ir a dormir, para que no olvides las cosas por las cuales quieres agradecer.
2. Ora con frecuencia: Dedícale un tiempo a la oración, a esa conversación privada con Dios para agradecer por los favores recibidos, muchas veces las obligaciones diarias hacen que olvidemos dar gracias al creador.
3. Realiza actos de servicio: Ayudar a los demás es una forma concreta de expresar nuestra gratitud, por ejemplo estos espacios donde nos reunimos y damos gracias a quienes nos rodean por su labor diaria y sus servicios que prestan en beneficio de nuestra comunidad.
4. Contempla la naturaleza: La belleza de la creación es una fuente inagotable de gratitud, a veces olvidamos que las flores siendo tan pequeñas y tan bellas están allí para mostrarnos la grandeza y perfección del creador, admirarlas y cuidarlas es también forma de demostrar gratitud.
5. Rodéate de personas positivas: Las personas positivas nos ayudan a mantener siempre una actitud apropiada para recibir buenas cosas y para hacer mejor nuestro trabajo, además podemos ser multiplicadores de esa actitud en nuestro lugar de trabajo.
En los diferentes espacios y lugares donde se reúne la comunidad tomasina, se realizaron diversas actividades lúdicas, se cantaron los villancicos, además de compartir alimentos para integrarnos aún más y fortalecer las tradiciones junto con los lazos de fraternidad en nuestra institución.
La gratitud es una virtud que nos conecta con el amor y la bondad de Dios. Reconocer las bendiciones, grandes y pequeñas, nos ayuda a vivir con humildad, alegría y paz interior. Al agradecer, no solo valoramos lo que tenemos, sino que también fortalecemos nuestra fé, porque confiamos en que todo lo recibido es parte del plan divino. Practicar la gratitud transforma el corazón, nos acerca más a los demás y nos permite ver la vida con esperanza y optimismo.
¡Llenos de gratitud, vivimos la Navidad en la Santoto!